Esta crema de Células Madre no es una hidratante “con beneficios”: es un tratamiento antiedad global diseñado para frenar el deterioro celular y reactivar la maquinaria interna de la piel antes de que el daño sea visible. Su fórmula combina tecnología de células madre vegetales —capaces de prolongar la longevidad de las células cutáneas— con un cóctel de hialurónicos, colágeno, arginina y extracto de olivo para actuar en tres niveles: longevidad, soporte estructural y protección frente al entorno.
Mientras la mayoría de cremas se limitan a aportar agua y confort superficial, esta trabaja sobre el origen del envejecimiento —no sobre el síntoma— protegiendo frente a polución, rayos UV y luz azul a la vez que estimula la renovación celular y la redensificación tisular. El resultado: piel que no solo “se siente mejor”, sino que se comporta como una piel más joven.
Una crema que sustituye la necesidad de varias: hidratante, barrera, antiedad, redensificante y escudo urbano — en un solo producto.